Noel Álvarez*
Los seres humanos sentimos una curiosidad natural por conocer lo que nos depara el futuro. Los últimos meses han sido de una tensión constante para mí e imagino que igual para mis compañeros del comando ConVzla. A lo largo de ellos, he debido desplegar mi paciencia y ampliar la tolerancia para responder con sonrisas y subterfugios, los continuos interrogatorios de familiares, amigos, y conocidos, todos tratando de averiguar cuál sería el plan “B” de María Corina, en el caso de que no le permitieran inscribirse como candidata.
Pero eso no era todo, del otro lado tenía otro grupo de personas que se me acercaban ofreciendo apoyo y al preguntarles sobre cuál sería su aporte, se deshacían en excusas para luego expresar que su contribución sería en el ámbito de la asesoría estratégica. Al final, lo que unos y otros perseguían era obtener información de primera mano para salir a “importantizarse” con unos supuestos tubazos. “Queremos tener un canal de comunicación directo con la candidata” era y sigue siendo la frase más repetida en todos los encuentros.
A todos ellos, siempre les transmití un concepto, incluso se los dije a mis más cercanos colaboradores, cuando notaba que ellos también estaban siendo devorados por la impaciencia: “Cruzaremos el puente cuando lleguemos al río”. Lo repetí, una y mil veces, a pesar de ello, sé que muchos no les satisfizo la respuesta, quizás porque no la entendieron o tal vez porque no cubría sus expectativas.
En estos momentos, cuando estamos próximos a las riberas del río y probablemente parte de su curiosidad, ya haya sido satisfecha, considero que ha llegado el momento de laborar sobre el concepto de la tan malquerida frase.
La expresión «Cruzar el puente cuando se llega al río» encapsula la esencia de la adaptabilidad y la sabiduría práctica. Significa enfrentar los desafíos a medida que se presentan, en lugar de preocuparse en exceso por lo que podría ocurrir en el futuro. Al adoptar esta mentalidad, podremos liberarnos del peso de la anticipación y centrarnos en encontrar soluciones efectivas en el momento oportuno.
En la travesía de la vida, nos enfrentamos a una multitud de decisiones y problemas que exigen nuestra atención. En este constante flujo de circunstancias, a menudo nos encontramos ante la tentación de anticiparnos a los acontecimientos, tratando de resolver problemas que aún no han surgido o que todavía no ha llegado el momento de enfrentarlos.
Un claro ejemplo de este principio se encuentra en el ámbito de la política: con frecuencia, los dirigentes políticos enfrentan la presión de tomar decisiones estratégicas sin tener todos los datos disponibles. Aquellos que se aferran a la idea de «cruzar el puente cuando se llega al río» reconocen la importancia de la flexibilidad y la capacidad de respuesta ante los cambios del entorno. En contraste, aquellos que se apresuran a tomar decisiones precipitadas corren el riesgo de cometer errores costosos que podrían haberse evitado con una evaluación más cuidadosa de la situación.
Otro ejemplo común de apresuramiento se encuentra en el ámbito individual: muchas personas experimentan ansiedad por el futuro, preocupándose por escenarios hipotéticos que podrían jamás materializarse. Esta preocupación excesiva puede llevar a tomar decisiones impulsivas o a adoptar un enfoque de «solución preventiva» que no siempre es el mejor. Aquellos que practican la filosofía de «cruzar el puente cuando se llega al río» aprenden a vivir en el presente y a abordar los problemas a medida que surgen, en lugar de anticipar constantemente lo que podría suceder.
El precepto de, «cruzar el puente cuando se llega al río» nos recuerda la importancia de la adaptabilidad y la pragmática. Al adoptar esta mentalidad, podremos liberarnos del peso de la anticipación y centrarnos en encontrar soluciones efectivas en el momento oportuno. Así que la próxima vez que ustedes se encuentren preocupados por el futuro, recuerden este antiguo proverbio y confíen en su propia capacidad para enfrentar los desafíos a medida que estos vayan surgiendo.
*Coordinador Nacional del Movimiento Político GENTE
Noel Álvarez, Coord. Nac. del Mov. Político GENTE 